jueves, 20 de marzo de 2025

El coche C-51 y otros vagones del Cariñena-Zaragoza

Con este texto completamos todos los coches de viajeros que tuvo el ferrocarril de Ponferrada a Villablino. ¡Con el más extraño! El único coche de viajeros de ejes del P.V. Ya vimos los originales Carde y Escoriaza de 1921, los procedentes de segunda mano de los ferrocarriles Plazaola y Bidasoa, y nos queda el curiosísimo caso de los vehículos llegados desde el ferrocarril Cariñena a Zaragoza.

En el foro alemán Drehscheibe Online Foren podemos encontrar muy interesantes imágenes antiguas del Ponferrada-Villablino, que en ocasiones son fuente única de fotografías de vehículos concretos. Los furgones no suelen ser tan fotografiados como los coches de viajeros o las locomotoras, y sin embargo en esta web aparecen en excepcionales primeros planos y protagonistas de las fotografías, como este furgón D-1 procedente del Cariñena-Zaragoza.

El ferrocarril de Cariñena a Zaragoza

El primer ferrocarril que unió estas dos poblaciones, separadas 47 kilómetros, se vinculó muy directamente con el vino y la filoxera. El primero porque fue la razón de su existencia, el transporte de vinos de la comarca de Cariñena, y el segundo, porque esta plaga fue razón de su implantación, pero también de su decadencia. El 17 de enero de 1885 se creó la empresa “Ferrocarril de Cariñena a Zaragoza”, que consiguió inaugurar la línea el 10 de agosto de 1887. Eran tiempos en los que en Francia ya afectaba la plaga de la filoxera (1877 a 1887) y los vinos españoles encontraron una efímera salida al mercado internacional, situación que se volvió al revés cuando la plaga se extendió por España y los viñedos franceses ya se habían recuperado.

La locomotora número 2 al frente de un tren del Cariñena-Zaragoza. Esta imagen, junto a dos mostradas más adelante de los vagones y coches de este ferrocarril, se han publicado, entre otros lugares, en la web del Centro de Interpretación del Ferrocarril de la Comarca de Cariñena.

Con dificultades económicas y sin posibilidad de expansión, ni acuerdos con otros ferrocarriles como el de Utrillas, el “Tren del vino” sufrió una nueva competencia con el Ferrocarril Central de Aragón, que comunicaba Calatayud con Teruel. Fue esta compañía de vía ancha la que finalmente adquirió al Cariñena Zaragoza, de vía métrica, en abril de 1913. Comenzó en ese momento la sustitución de su recorrido hacia el ancho ibérico, operación que culminó el 28 de febrero de 1933. 

Furgón del Cariñena-Zaragoza (Foto CIFCC) en aquel ferrocarril. Podemos comprobar la enorme diferencia con su estado, tras profunda transformación, con los furgones serie D del P.V.

El Cariñena-Zaragoza contaba con cinco locomotoras de vapor Sharp, Stewart and Co., de las cuales se conserva la número 5 en Sabero, que allí se numeró “10 El Esla”. En el material remolcado, según inventario de 1900, contaba con 3 coches de primera clase, 6 de tercera, 2 mixtos, 3 furgones, 8 vagones cerrados y 48 de otros tipos, como abiertos, plataformas o trucks.

La locomotora "El Esla" se conserva en el Museo de la Siderurgia de Sabero.

El coche de dos ejes C-51

Se trata del único coche de viajeros de dos ejes que circuló en el P.V. En esto nuestro ferrocarril, una vez más, fue peculiar y avanzado en su época, porque lo habitual en las primeras décadas del siglo XX en otros ferrocarriles secundarios y de corta entidad era usar aún de forma preferente este tipo de vehículos, más propios de los primeros tiempos del ferrocarril.

Uno de los coches de dos ejes de tercera clase del Cariñena-Zaragoza. No sabemos cual fue exactamente el que acabó siendo el C-51 en Ponferrada, ni conocemos fotos del mismo como C-51, pero sí su apariencia como coche de viajeros. Foto: CIFCC.

La MSP compró, de segunda mano, cuatro vehículos al ferrocarril de Cariñena – Zaragoza cuando este ya había cerrado en su “versión vía métrica”. Comprendía el lote un coche de viajeros de dos ejes “con cinco compartimentos y acceso por otras tantas puertas y estribo” autorizado a circular en 1941. Un anacronismo cuando ya circulaban todos los Carde y Escoriaza de bogies, con plataformas de acceso en balconcillos extremos. Y asumiendo una numeración sin mucha razón, “C-51” cuando todavía solo existían cuatro coches de tercera clase C-1 a C4. Los Plazaolas y Bidasoas llegarían desde 1943. Desconocemos la numeración de su serie en tierras mañas, pero en una fotografía de este ferrocarril aparece un coche de tercera clase numerado como “C 102”.

Fotografía publicada en varios grupos Facebook y de autoría desconocida, del furgón ambulancia apartado en Ponferrada.

Desde esta fotografía y un plano confeccionado en el P.V. a su llegada, podemos determinar algunas de las características técnicas de este coche. Como decimos, lo componían cinco departamentos independientes con bancos corridos en todo el ancho del coche, enfrentados, que si suponemos cuatro pasajeros por banco nos dan un total de 40 viajeros. El acceso a cada departamento se realizaba de forma independiente por una puerta a cada lateral en cada departamento, en Cariñena nombrados con las letras “a” a “e”. No existía comunicación por los testeros con otros coches, ni entre departamentos, ni contaban con aseo. Disponía de tres aireadores en el techo y no poseía freno continuo. Unas barras-asidero y un estribo continuo con pequeños peldaños para cada puerta permitían el acceso al vagón desde el exterior.

Sendos esquemas, el superior del C-51 en Ponferrada, en plano dibujado por los ingenieros de MSP. En la imagen inferior, del conjunto de esquemas de locomotoras, coches y vagones del P.V., las dimensiones generales del Furgón Ambulancia.

Si circuló así en el P.V., desde luego no existe constancia gráfica conocida, y este estado perduró hasta 1962, año en el que el coche sufrió una profunda transformación de la que hablaremos más adelante.

Otras dos fotos del foro alemán. En la superior, en las vías fuera de andén de la estación de Ponferrada, una miscelánea de vagones, entre los que están el furgón ambulancia, otro furgón, un bordes medios con garita para el guardafrenos y una plataforma de ejes.
Uno de los escasos ejemplos que nos permiten asegurar que los pequeños furgones D también acompañaban al tren correo, aunque lo habitual era que en la composición figuraran los furgones de bogies.

Los furgones serie D

Los otros tres vehículos del lote adquirido al Cariñena – Zaragoza eran los tres furgones de dos ejes, de los que desconocemos numeración de origen, pero que en el P.V. llevaron la matrícula Df-1 a 3. Fueron construidos por Carde y Escoriaza en Zaragoza y en Ponferrada comenzaron a circular a finales de 1941. El Df-2 fue rotulado como “Vagón de socorro” y decorado en gris. Los Df-1 y 3 lo fueron en verde con los perfiles metálicos en negro, al igual que el Furgón Ambulancia FA-1 en sus primeros tiempos.

Furgón socorro, ya apartado en Ponferrada, en fotografía de Fernando Repiso.

Si proceden del grupo como el F.201 del que conocemos una foto en el Cariñena -Zaragoza, desde luego que a su llegada a Ponferrada sufrieron una radical transformación. No solo recibieron el freno automático por aire comprimido de uso en El Bierzo, también toda su caja es nueva y diferente, perdiendo el espacio de retrete, el departamento de correo, la perrera y ganando el tipo de enganche de platillo de uso en el P.V.

El furgón socorro en Ponferrada, en foto publicada en el foro alemán. A su izquierda, el furgón ambulancia. A pesar de su distinto origen, los parecidos de sus cajas son evidentes.

El bastidor de los furgones D resulta idéntico al del coche C-51 en dimensiones. Por ejemplo, el empate entre ejes de 3,6 metros y longitud del bastidor de 7 metros, e incluso la envergadura de la suspensión de ballestas. De forma tradicional, los vagones de mercancías montaban ballestas de menor longitud, atendiendo a la menor necesidad de atenuar las imperfecciones de la vía a las mercancías respecto a los viajeros.

Una de las escasas imágenes que hemos localizado del tercero de los furgones, el D-3, captado por Xavi Tomás en Ponferrada.

Las dudas razonadas del Furgón Ambulancia

En sendos documentos de 24 de septiembre y 8 de octubre de 1959, el director del ferrocarril P.V. solicitó, a la división inspectora e interventora de las compañías de ferrocarriles de vía estrecha, la transformación del C-51 “en coche de tipo unificado de dos bogies”. Esto supondría en definitiva casi la creación de un vehículo nuevo, por la enorme diferencia conceptual de ambos tipos de vehículos. La aprobación por esta instancia superior para tal reforma fue recibida en la MSP el 10 de octubre de 1962, tres años después de la solicitud. Para este momento, la intención inicial ya se había rebajado, proponiendo en su lugar la transformación del coche de tercera clase en un innovador “Furgón Ambulancia FAfh-1”. La idea, como vimos en plena pandemia de 2020 en este blog, era el transporte de mineros heridos en las explotaciones hacia los sanatorios de Ponferrada, tarea que, pese a la cantidad de accidentes mineros de aquellas décadas, creemos que apenas, o nunca, llevó a cabo.

Tres esquemas de los furgones D. El superior pertenece a las hojas-catálogo del ferrocarril en donde aparecían todas las locomotoras, coches y vagones. Nos permite comparar las similares dimensiones con el esquema anterior del furgón ambulancia. Debajo, un esquema más detallado dibujado por los ingenieros de la empresa, y el último un dibujo creado por Carmelo Zaita.

Si la autorización tardó en llegar tres años, la reforma no se demoró tanto, pues la MSP publicó un documento con la “Liquidación definitiva de la obra ejecutada” el 16 de septiembre de 1963, citando el coste de los trabajos en 91.098 pesetas de 1963.

Dos fotos más del furgón ambulancia. La inferior, una vez más, del foro alemán. La superior, de Diego González, de la época en que el FA-1 estuvo custodiado por el particular que lo adquirió, y previo paso a su estancia en el Museo del Ferrocarril de Ponferrada. Podemos comprobar como conservaba su color verde.

Hasta ahora habíamos mantenido que el FA-1 podría proceder del furgón D-3 y no del C-51. ¿Qué nos llevaba a esa suposición? Pues por un lado la escasez de fotografías del D-3 respecto a sus dos hermanos, que sobrevivieron más años. Por otro, la estructura de la caja idéntica en los tres furgones respecto al furgón ambulancia. Como acabamos de decir, las tres cajas de los “D” eran nuevas fabricadas en Ponferrada, y se repitió el mismo proyecto con el furgón ambulancia, aprovechando las idénticas dimensiones de su bastidor. Por fortuna, la documentación antigua conservada nos saca de dudas.

 Los vagones en la actualidad

Como contamos en este blog, el Furgón Ambulancia fue conservado hasta finales de los ochenta en las instalaciones de Ponferrada, momento en el que fue adquirido por un particular que le practicó pequeñas reformas como la instalación de una pequeña cocina en el departamento del jefe de tren. Posteriormente, fue cedido al Museo del Ferrocarril de Ponferrada y expuesto desde su inauguración en mayo de 1999 y hasta la actualidad, pero ya barnizado, habiendo perdido su anterior color verde.

Con la lonja ferroviaria en construcción, todas las locomotoras, coches y vagones que se encontraban apartados en la playa de vías de Ponferrada, y que no fueron restaurados, fueron apartados hacia la parte inferior del muro de transferencia con las vías de Renfe/ADIF, detrás de los supermercados actuales.

De la posición anterior, una vez abierto el museo, dos furgones, un coche mixto y un furgón correos (O realmente lo que quedaba de ellos) fueron trasladados al interior de la lonja del museo del ferrocarril.

Peor suerte tuvieron los furgones. El D-3 desapareció con fecha anterior, y los dos restantes permanecieron abandonados en las vías ponferradinas hasta finales de los ochenta. Fueron amontonados con todas las locomotoras de vapor apartadas del servicio en la estación de Ponferrada, y a la culminación de la lonja de locomotoras, incluidos sin restaurar, y con las maderas calcinadas fruto del vandalismo, conservados temporalmente en el interior del museo, junto al coche mixto AB-1 y al Furgón Correo FC-2. Por desgracia, los cuatro vehículos fueron evacuados a otras instalaciones municipales cercanas al Hospital del Bierzo, en el momento de realizar la obra de cubrimiento de vías no usadas en la lonja del museo, y posteriormente fueron desguazados. 

Tres imágenes de los dos furgones (D1 y D2), el coche mixto AB-1 y el Furgón Correo FC-2 en su estancia en el Museo del Ferrocarril, antes de ser trasladados al entorno municipal del Hospital del Bierzo, paso previo a su desaparición.

Agradecemos a Manel Ramos su fundamental colaboración para resolver el vacío documental con la transformación y origen del Furgón Ambulancia.

1 comentario: